Nuestro piso de Plaza Catalunya, requiere contar con una serie de suministros poder vivir cómodamente. El primero, sin el que nos sentimos totalmente perdidos, es la electricidad, dado que esta nos permite mantener el funcionamiento de nuestros electrodomésticos. El segundo es, sin lugar a dudas, el gas, ya que nos posibilita calentar nuestra agua y nuestro hogar. Para que funcione correctamente, desde Fincador, vamos a recordarte algunos aspectos que debes tener en consideración.

La primera cuestión es saber que existen distintos tipos de suministros de gas que podemos contratar. Estos son el butano, propano o de gas natural. La posibilidad de elegir unos u otros, dependerá de nuestra ubicación geográfica y de las necesidades que tengamos. En general, se aprecia que el gas natural tiene un precio de comercialización menor, seguido del propano y por último el butano. Ya depende del uso que le vayas a dar y si puedes acceder a la opción deseada.

Una vez que te has decantado por una opción, debes mantener un uso responsable de este tipo de energía. Lo más importante es que mantengas un buen control de seguridad de las instalaciones. Lógicamente, cada tipo de gas, tiene características diferentes, debiendo aprender a identificar qué aspectos requieren de nuestra atención. Una de las cuestiones que debes recodar es pasar las inspecciones periódicas en los plazos que se marcan por ley. En el caso del gas butano, está será cada 5 años. En el caso del gas natural, la inspección completa de la instalación también es obligatoria cada quinquenio. Si utilizamos propano a granel, deberemos pasar una inspección cada dos años. Generalmente, la empresa distribuidora nos avisarás de dichas revisiones y se acercará un técnico a nuestro domicilio para llevarla a cabo.

También debes realizar comprobaciones de los elementos instalados, como pueden ser las tuberías, engranajes, los canalizadores, calderas y equipos de medición. Este sencillo proceso, nos permitirá estar seguros de que nuestras instalaciones funcionan correctamente y evitaremos poner en riesgo nuestro hogar.  Como ves, es bastante sencillo y los beneficios son múltiples.